*NOTA:
después de unas breves vacaciones por las fiestas regresamos a la programación normal.
Espero hayan pasado felices fiestas y mis mejores deseos para este año.
Cuantas
veces no hemos escuchado esta frase “es el precio de la fama” cuando algún famoso
se queja del acoso de los fans o los medios, pero ¿se han parado a pensar en todo lo que implica esto? De nuevo este post surgió
de un par de vídeos que subieron Rubius y Germán hace unos meses hablando sobre
el acoso que han vivido de parte de los fans (y en el caso de Rubius también de
los medios) y al margen de si nos gusta o no su contenido o de lo que pensemos
de ellos, tienen que admitir que se han vuelto “figuras públicas” famosas en los
últimos años y que por ende han sido víctimas de aquello que los famosos convencionales
(aka los actores, cantantes, escritores, etc.) han padecido por años y lo peor
es que en los mismo comentarios de “fans” te encontrabas con que todo mundo les
decía “de que te quejas es el precio de la fama”, “te debes a nosotros” y similares.
La cuestión que yo veo aquí es la palabra “precio”, tal parece que cualquier
persona que se vuelve famosa por X razón debe aceptar que la acosen y la
observen como atracción de circo las 24 horas del día los 365 días del año, tal
parece que los fans creen que esa persona les pertenece y que es su bufón
personal; suena duro ¿verdad? Pues así se comportan muchos.
Pongamos
algo en claro primero, no me gustan las revistas o programas de chismes
(cotilleo, salseo o como sea que le llamen en tu país) no los consumo, pero eso
no quiere decir que en algún punto no he visto u hojeado alguno, pero justo por
eso es que no los consumo, porque me parecen vergonzosos, me parece deplorable
que alguien que dice ser fan de alguien viole de esa manera la privacidad de la
persona que sigue, o aunque no seas su fan, me parece reprobable que solo vivas
para acosar a alguien o estés a la espera de que esa persona haga algo
vergonzoso para estar ahí y burlarte o alimentarte de la miseria ajena, como lo
hacen algunos “periodistas” de espectáculos (si es que a eso se le puede llamar
periodista, más bien son acosadores profesionales) y OJO no estoy diciendo que
los programas de espectáculos estén mal o que yo soy tan perfecta que no soy
chismosa y no me interesa la vida privada de alguien que sigo, no, claro que veo
de vez en cuando notas de espectáculos; también soy chismosa y reviso de vez
en cuando Instagram y Twitter de los famosos que sigo, pero hay una diferencia,
las notas de espectáculos (las VERDADERAS notas de espectáculos) hablan de lo
que nos interesa, o que debería interesarnos a los fans: el trabajo de la
persona famosa, el contenido que crea, que está haciendo ahora referente a su
trabajo; no sobre con quien se está acostando o de qué color son sus calzones,
estos ya son temas de cotilleo y son cosas que suelen interesarles a los haters
o a los fans obsesivos, son cosas que poco deberían de importarnos a quienes
seguimos a una persona por su trabajo.
Pero
volviendo al tema, “el precio de la fama”, ósea que porque alguien es famoso ¿tenemos
carta blanca para acosarlos?, en circunstancias normales no haríamos algo así,
por mucho que nos gustara o interesara alguien, la mayoría de nosotros (o eso
quiero creer) tenemos bien claro que no está bien acosar a alguien, es más es
un delito. En otras circunstancias no acamparíamos afuera de la casa de
alguien, no lo estaríamos observando y fotografiando a medio kilómetro de
distancia todo lo que hace, no hurgaríamos en su basura ni trataríamos de
arrancarle un mechón de cabello. Todo eso lo haría un psicópata, un loco, no un
fan cualquiera ¿verdad?, ven lo enfermizo que es decir “es el precio de la fama, te debes a nosotros” cuando alguien
famoso es acosado. Este será tema de otro post pero en resumen, ok si, nosotros lo volvimos famoso y lo
mantenemos ahí pero él no nos pertenece, su vida no nos pertenece, una cosa es
lo que ellos compartan por sus redes sociales y otra estar como buitres
acosando a alguien a la espera del “salseo”, es repulsivo y enfermizo. Si no haríamos
esto en circunstancias normales ¿porque lo hacemos cuando alguien es famoso?
¿Recuerdan
un capítulo de South Park donde los chicos deciden ayudar a Britney Spears cuando
estaba a todo lo que daba sus escándalos de drogas y alcohol? Bueno en el capítulo
los chicos tratan de tomarle una foto, pero para variar la cagan y Britney se
pega un tiro en la cabeza con una escopeta, pero como es south park no se muere
sino que va por ahí sin la mitad superior del cráneo y como Stan y Kyle se
sienten mal, tratan de hacerla pasar desapercibida pero cuando los paparazzi la
descubren igual se dedican a tomar fotos de que tiene celulitis o se le ve una
bubi, ¡le falta media cabeza pero ellos siguen buscando de donde sacar salseo! Así
se ven algunas personas que viven de los sueños rotos. ¿En eso nos hemos
convertido? Porque así parece cada que alguien dice que porque se quejan si es
el precio de la fama, ellos querían fama ¿no? Ahora se aguantan. ¿Ven diferencia
con el capítulo de south park? porque yo no. Sé que esto ha estado pasando
desde que la farándula existe pero ahora con internet y más aun con los
youtubers lo vemos más cercano; antes como que los famosos eran esos entes
inalcanzables y fabulosos que vivían en sus aisladas mansiones de Berberly
Hills y por eso entiendo que existieran las revistas de cotilleo (que eran y
siguen siendo reprobables) pero ahora que internet y las redes sociales san democratizado
tanto la fama, los han humanizado y por ello podemos ver más de cerca toda la
mierda que pasan aquellos que son famosos y más aún ver como alguien consigue
fama y sigue subiendo hasta convertirse en una figura pública como Rubius, Germán,
Pewdiepie, Yuya, Werever y todos los youtubers famosos, que en su caso no se
siente como que fueran entes inalcanzables sino que son gente común y corriente
que nosotros encumbramos pero que también acosamos como psicópatas bajo el
pretexto del “precio de la fama” ¿se dan cuenta de lo enfermizo que es esto? Vemos
más de cerca todo lo que ellos hacen pero también todo lo que sufren y aun así no
nos importa y muchos se siguen comportando como los paparazzi que acosaron a Britney
en south park; y dije nos porque yo también he sido así a veces, pero creo que
ya pase por la impresión de Kyle y Stan, me di cuenta de lo enfermizo que es
eso y del daño que le causamos a quien está del otro lado de la pantalla; internet
o la revistas y los programas de chismes diluyen la realidad y la
responsabilidad que tenemos en que todo ello exista, en que el acoso por parte
de los medios continúe, pues si no hubiera quien consumiera esa mierda no habría
quien la buscara y sacara a la luz. No se les olvide que quien está detrás de
toda la fama es un ser humano y no porque sea famoso pierde derechos o tiene
porque que aguantar el acoso de parte de los fans, si se debe a nosotros porque
nosotros le dimos fama pero no somos dueños de su vida ni es nuestro bufón
personal que debe entretenernos cada que
nosotros queramos.
Ustedes
que opinan ¿Creen que es el precio de la fama o el que alguien sea famoso no
implica que podamos acosarlo? ¿Consumen este material de chismes? Espero sus
comentarios, me despido y nos leemos la próxima vez.
PD:
el capítulo se llama “el nuevo look de Britney” por si lo quieren buscar en YouTube
Me parece un tema interesante, es que a acaso todo lo que resalta al interés público es tomado como objeto de consumo que esta a nuestra merced? Algo así como la botella de agua que compras en la calle y que cuando la terminas vas apachurrando y retorciendo, porque pues ya la compraste es tuya y al fin es un objeto, pero en el caso de las personas que ofrecen entretenimiento... a caso se olvida que no son cosas? Si al igual que la gente que ofrece un un servicio, su fama y fortuna se deben a algo que nos gusta y que vemos es decir consumimos, pero es eso, lo que hacen, más no ellos como personas!!
ResponderEliminarbuena analogía, y si parece que la fama que rodea alguien hace que la mayoría olvide que son personas y que lo que esta consumiendo es su trabajo, el contenido que crean no a la persona como tal
EliminarEsto me recuerda a una entrevista que les hicieron a KC y Rich en un programa de televisión por ahí del 73 en donde el presentador es preguntó, especialmente a K, ¿qué se sentía tener a un montón de gente corriendo tras ellos? a lo que ella respondió "I´ts so funny, when everyone shouts "Karen i love you" or "Richard it's my lover", we just do our work, I like to give signatures and smiles. Rich volteó y la miró, luego hizo un gesto como de hironía y le dijo: are you kidding? This is more than just fun, it's great, y la gente realmente no sabía lo que sucedía dentro de sus mentes, dentro de sus cuerpos, dentro de su familia y sus vidas, vidas tan simples como las de dos hermanos jóvenes y talentosos que crecieron con sus padres y que jugaban con los chicos de su barrio, iban a la escuela, a la iglesia y que en el momento en el que llegó la fama a sus vidas la revolucionó radicalmente, convirtiendolos a ambos en presos de sus propios infiernos, por un lado Rich adicto a las qualade "somníferos" por el otro Karen conviritendose en la juez de su apariencia y en el control de su aspecto ya que de lo demás era su propia familia quien se encargaba de controlarl todo a su alrededor haciendola una anoréxica y posteriormente bulímica al grado de que todas estas cosas terminaran con su vida, un matrimonio fallido, hijos que quiso tener y nunca tuvo, en fin, la lista de los traumas y los deseos fallidos de los artistas son interminables, lástima que ni con todo el dinero que poseen, pueden dar fin a sus insatisfacciones ni liberan a todos sus demonios para poder tener una vida cómoda y feliz como aparentemente se muestra en los programas de televisión. Saludos querida, besos.
ResponderEliminartotalmente de acuerdo Cinth, el que los famosos sonrían o digan que todo esta bien en las entrevistas no significa que sea verdad, ademas, quien podría ser feliz con miles de ojos acosándote? los problemas comienzan cuando los fans se sienten dueños de la vida de esa figura publica y comienzan a acosarlos y tratarlos como objetos. Nunca nos paramos a pensar en lo que la fama trae a sus vidas.
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