domingo, 6 de octubre de 2019

Oda a la mediocridad


¿Ustedes que piensan cuando escuchan la palabra “mediocre”? seguramente alguna connotación negativa, que es ser conformista, con pocas aspiraciones, o ya de plano un fracaso. Si y no. Entiendo porque se usa la palabra mediocre como un adjetivo negativo, pero es que, si somos estrictos, mediocre simplemente alude a las cosas que están en el medio, que son parte de la media, del promedio. Y siguiendo esa idea, la mayoría de nosotros somos mediocres. Bajen las antorchas y aléjense del teclado (que ya los veo lanzándose furiosos a comentar), primero déjenme desarrollar la idea y ya después hablamos.


Me refiero a que la gran mayoría de quienes estamos leyendo esto ahora (me incluyo) no tenemos nada realmente especial, somos personas promedio con vidas promedio. No somos los mas inteligentes de nuestra generación escolar (ya ni hablemos del país o del mundo), de nuestra carrera o salón; no somos los más guapos, más altos, más guapos, más ricos, más flacos, más bajos, más pobres, el mejor cantante, dibujante, corredor, matemático, etc. Somos del promedio, del monto, mediocres. Y NO ESTA MAL.

Desde niños nos meten la idea de que tenemos que ser los mejores en cualquier cosa que hagamos y ese pensamiento me parece un tanto peligroso hasta cierto punto; o talvez no peligroso, pero si desmotivante (cuando el efecto deseado es el contrario). Seamos realistas, la mayoría de nosotros por más que nos esforcemos jamás dejaremos de ser parte del promedio. No destacaremos demasiado en nada mas allá de nuestros grupos sociales inmediatos (escuela, trabajo, amigos, familia). En términos más fríos, casi toda nuestra vida estaremos bajo la campana de Gauss y pocas veces estaremos en alguno de los extremos (ya sea hacia lo negativo o positivo), siendo así casi siempre formaremos parte de la media, en el promedio. Y teniendo eso en cuenta, el meternos en la cabeza desde niños que debemos ser super pro en cualquier cosa que hagamos termina por desanimar al darte cuenta de que, si bien puedes ser muy inteligente, muy rápido, muy bueno bailando, bueno dibujando, etc. Siempre habrá alguien que lo haga mejor que tú y realmente jamás serás EL MEJOR o al menos te costará demasiado.

Antes dije que no esta mal ser alguien promedio y lo digo porque al darle una connotación tan negativa a ser alguien “del montón” entonces nos presionamos demasiado hasta en nuestros hobbies. A mi me gusta dibujar y creo que he mejorado con los años, pero sé que ni por asomo soy tan buena como algunos artistas que sigo en Instagram y mucho menos como pintores o dibujantes consagrados; pero para mi eso no es un problema. Porque no quiero vivir del dibujo, me gusta, me divierte y relaja, pero no lo hago con miras de convertirme en profesional, es solo un pasatiempo; y estoy segura que como yo hay muchas personas que practican un deporte, bailan, pintan, leen o escriben únicamente como entretenimiento, sin mayores pretensiones que pasarlo bien y me parece perfecto.

Evidentemente tampoco digo que esta mal que quieras volverte pro en lo que hagas e intentar ser el mejor en eso, esta perfecto también. Pero seamos honestos, la mayoría de las veces socialmente se da mucha lata con que seas el mas pro en todo lo que haces o en lo que eres bueno. Lo cual lleva a que ya de adulto sigas sintiéndote un tanto presionado a tratar de ser el mejor en cualquier actividad que emprendes (porque internalizaste esa exigencia social).

Ejemplos tengo un par: 


El primero puede parecer un tanto truculento pues es sobre un filósofo: Ludwig Wittgenstein. Este hombre dedico gran parte de su trabajo al desarrollo del lenguaje y su rol en la creación de las sociedades como las conocemos; pero lo que nos importa son las decisiones que tomo en su vida (por cierto, échenle un ojo a su biografía que es interesante en general). Wittgenstein provenía de una familia acomodada, pero en algún punto de su vida, para horror de su familia, decidió dedicarse a ser jardinero pues decía que al ser un trabajo únicamente físico y tan mecánico le permitía seguir pensando y desarrollando sus ideas sobre el lenguaje, pues no le requería gran esfuerzo mental. Se dedico a eso gran parte de su vida y vivió una vida decorosa y lejos de los lujos que el dinero de su familia podía darle. Para el final de su vida, pidió que su epitafio dijera “aquí yace un hombre que vivió como quiso he hizo lo que quiso” (parafraseando porque no recuerdo las palabras exactas). Al final fue un filosofo importante pero poco le importo valerse de los contactos de su familia para ganar mas fama en vida. decidió tener una vida “mediocre”, sin grandes lujos, sin codearse con alta sociedad ni rodeado de fama, el simplemente quería tener dinero para vivir y poder dedicarse a estudiar lo que siempre le intereso: el lenguaje. 


Pero también les traigo un ejemplo más mundano: una amiga mía era muy buena en la escuela en todo sentido (en la prepa) y como decidió tomar las optativas del área II (ciencias biológicas y de la salud) muchos le decían que porque no se metía a medicina (por aquello de que necesitas ser alguien con muy buen promedio e “inteligente”, o al menos lo suficientemente bueno para pasar exámenes) y le iba bien en la optativa mas perra que era biología y anatomía. Total, que mucha gente incluida profes le decían que sería buena médica, pero ella insistía en que no le llamaba la atención dedicarse a eso y total que al final ella decidió estudiar otra cosa y tampoco se encapricho con entrar a la UNAM (que también todo mundo le decía eso) ella quería quedarse en la autónoma de Hidalgo para poder estar mas cerca de su casa. Y me parece perfecto que haya tomado esas decisiones, finalmente eran las que a ella la hacían feliz.

Tras estos ejemplos, llegamos a mí. Soy una persona muy simple en cuanto a mis aspiraciones en la vida. En eso me parezco un poco a Wittgenstein, francamente lo único que quiero es una vida decorosa y promedio, ni más ni menos. No me interesa ser la próxima Skinner, Freud o Ribes; no quiero cambiar al mundo con mi trabajo, no me interesa la fama, no aspiro a grandes lujos, viajes, mucha ropa, autos caros ni nada de eso. Solo quiero un trabajo que me dé el suficiente dinero para pagar los servicios, el internet, comer, ahorrar y poderme comprar algo de vez en cuando, ya está. Me gusta la vida que tengo ahora (rutinaria y tranquila), no me gusta viajar, ni estrenar cada 2x3; bueno hasta para la comida soy rutinaria (casi diario desayuno lo mismo). ¿esta tan mal querer vivir una vida promedio? ¿esta mal ser feliz con su vida tranquila y no querer liderar una revolución/cambiar el mundo? ¿esta mal hacer las cosas solo por hobbie? ¿esta tan mal ser “mediocre”?

Y ojo, estar bien con ser del promedio no significa hacer las cosas mal. Hacer las cosas al aventón, ser poco profesional, entregar mal los trabajos, ser un hijo de la chingada y regodearse de su ignorancia, todo eso que da la connotación negativa a la palabra “mediocre”, mas bien yo le llamaría incompetencia, valemadrismo y huevones. Una persona así no es alguien promedio, es un culero y cabron malhecho que no vale verga.


Este post lo escribí pensado en criticar esa contradicción social donde por un lado todo mundo nos insiste y anima a siempre ir por más y más lejos, pero por otro lado se critica y condena la codicia o a quien tiene/consigue mucho. También pensando en cuanto se critica a quienes estamos bien con una vida sencilla y no queremos tratar de ser siempre los mejores en cada cosa que emprendemos. No esta mal hacer las cosas solo por hobbie, no esta mal ser promedio, así como tampoco esta mal querer aspirar a mas (siempre que eso no se convierta en ambición desmedida). Finalmente, la mayoría somos o seremos mediocres, formamos parte del promedio y no está mal; no siempre se puede vivir en la cima ni ser siempre el mejor en todo. Mediocres del mundo, no se sientan mal por serlo, solo hagan su mejor esfuerzo sin importar si hay alguien mejor que ustedes.

Este es otro de esos temas que por falta de tiempo no había podido traerles y al final creo que quedo bien. ¿ustedes que opinan? Estaré encantada de leer sus comentarios. Por ahora yo me despido y nos leemos la próxima vez.