lunes, 16 de septiembre de 2019

Booktag de la vida


Hoy traigo un nuevo booktag, este es original de Sebas del canal “el coleccionista de mundos” (que ya se los he recomendado ampliamente antes y lo hago de nuevo, VEANLO). Al hacerlo en una entrada de blog pierde un poco la gracia de lo que planteaba Sebas, pues el lo hizo en un video sin edición alguna, sin cortes, ni música ni nada. Así que la gracia era verlo un poco sufrir, por estar sin filtros y tener que hacer todo “bien” a la primera. Pero bueno, como la gracia del blog es que no vean mi cara de mierda (xD) ni la horrible calidad de video de mi celular (que es la única cámara que tengo a mano) pues que se le va a hacer; solo podrán leer mis respuestas a las preguntas. Aunque les aseguro que hubo preguntas que me causaron problemas para buscar un libro que cumpliera con la consigna en mis estanterías.

Así que, bueno ya basta de preámbulos y vayamos directo a las preguntas.

1. Libros que empiecen por tus iniciales


Bueno mis iniciales son RGT (ahí diviértanse adivinando mis apellidos) así que los libros serian:

  • Recuerda aquella vez
  • GUERRA
  • The Blessed

2. Edad: cuenta los libros de tu estantería según tu edad a ver cuál sale

Salió “Violet & Finch” de Jennifer Niven. Es un libro que me encanta y del cual tengo pendiente hacerles una reseña.

3. Libro que tenga la misma estructura de hermanos que tu

Pues yo no tengo hermanos xD así que tendría que ser un libro con protagonista femenina sin hermanos, en este caso escojo a Charlotte de la saga Ghostgirl.

4. Libro que se desarrolle en tu país

“Abran fuego” de Alejandro Licona. Una novela desarrollada mayoritariamente en el norte de México, una novela…curiosa, llena de humor pícaro y situaciones subidas de tono.

5. Amor: libro que refleje el amor romántico que a ti te gusta

El que ocurre entre dos libros de una trilogía nacional que me gusta mucho: la trilogía “Quiéreme” de Anahí López. Seria el amor entre Ana y Juan, su relación entre el segundo y tercer libro (quiéreme si te atreves y quiéreme bien) me parece muy linda y sobre todo lo que ocurre al final del tercer libro, me parece un buen reflejo de una relación sana.

6. Amistad: libro que refleje la amistad que a ti te guste

No hay de otra, la amistad del Pollo, Simón y Molina del libro “#MasGordoElAmor” de Toño Malpica. La amistad de estos 3 es a prueba de todo y no he visto una amistad mas incondicional. Los amo. 

7. Libro que te traiga buenos recuerdos

“Memorias de una geisha” comencé a leer este libro por aburrimiento en unas vacaciones donde mis primos habían venido a mi casa; sin darme cuenta me leí unas 150 páginas en dos días leyendo a ratos, total que le pedí a mi prima que me lo prestara y a partir de ahí me lo devore. Cada que veo este libro en mi estantería me vienen varios buenos recuerdos tanto de ese verano como de a historia en general que la disfrute mucho.

8. Libro que refleje tus estudios/trabajo

Yo soy psicóloga y actualmente ejerzo mi profesión. De inicio no me acordaba de ninguno de mis libros donde hubiera un psicólogo (y no tengo ninguno de Katzenbach) pero me acorde de uno que aun no he leído: “el experimento” de Sebastián Fitzeck que trata sobre un experimento psicológico, así que listo.

9. Libro de la ciudad donde quieres vivir

Buenos aires y Santiago de Chile siempre me han parecido lugares bonitos para vivir, pero como no tengo libros que ocurran el Chile, voy a escoger “las cosas que perdimos en el fuego” de Mariana Enríquez. Una antología de terror urbano brutal que les recomiendo muchísimo. 

10. Muerte: un libro que refleje bien la muerte

Tokio Blues de Haruki Murakami. Si bien la trama se centra mas en el extraño triangulo amoroso del prota con dos chicas que representan su pasado y presente. Una buena parte del libro Watanabe reflexiona sobre la muerte de su mejor amigo y sobre el duelo que el y su novia pasan por esto. Una buena muestra de lo que es el duelo tras el suicidio de un ser querido.

11. Libro que represente tu color favorito

“solterona” de Kate Bollick, además de que es un libro interesante (un ensayo sobre la soltería femenina), tiene una edición preciosa de tapa dura, color menta (mi color favorito) con hojas de filo negro, I love it!

12. Libro que tenga que ver con tu música favorita

“Rockboy y la rebelión de las chicas” de Armando Vega Gil. Esta estuvo jodida porque no tengo ningún libro cuyo tema central sea la música y menos el rock, pero supongo que este vale porque Rockboy y sus amigos tienen una banda de rock :v (por cierto, es un librazo).

13. Libro que represente tu comida favorita

A mi me gustan mucho lo dulces y como no tengo (ni he leído aun) el libro de Charlie y la fabrica de chocolate, pues escojo “La panadería encantada” de Koo Byung Mo, que, si bien es un drama, por momentos bastante oscuro; la trama avanza justamente a través de esta panadería y sus panes dulces encantados, así que por eso esta acá. 

14. Deporte favorito

A ver, a mí los deportes no me gustan en general, ni verlos ni mucho menos practicarlos (soy bastante huevona, las cosas como son), pero si hay un par de spokons (animes deportivos) que han logrado que me parecieran interesantes (incluso en lo técnico) el tenis (the prince of tennis) y la natación (free!); por eso escogí “los años de peregrinación del chico sin color” de Haruki Murakami, pues el protagonista practica natación y se menciona buena parte del libro. 

Y listo, este fue el tag de la vida, espero les haya gustado y se hayan entretenido un rato. Pásense por los canales de Sebas que no se van a arrepentir.


domingo, 1 de septiembre de 2019

Dejemos de santificar la lectura


Ok, este es un post que quería traerles desde hace meses (básicamente para el día del libro) pero pues la vida (aka la tesis). Y ya no quedo para cuando yo quería, pero bueno el caso es que por fin ya está acá, les aviso que a lo largo del post por momentos voy a tirar algo de hate porque voy a hablar de varias cosas que traigo atravesadas desde hace mucho. Así que, pues nada, comencemos.

El titulo resume muy bien el espíritu de esta entrada, pero por si acaso vamo a dejarlo bien claro desde ya: ¡CON UNA CHINGADA, YA DEJEN DE SANTIFICAR LA LECTURA MALDITOS SNOBS! Listo ya podemos continuar. Vale ya en serio, la idea de este post surgió de un video del canal “ensayos de abril” donde Abril habla con Lourdes Moran sobre todos estos mitos edificantes que hay alrededor de la lectura y la literatura; y es uno de los mejores videos que he visto en booktube. De modo que esto vendría siendo como mis pensamientos sobre los temas tratados en ese video.

Y el primer punto que quiero tratar es DEJEN A LOS NIÑOS EN PAZ. Lo dije en mi post de como empezar a leer y lo repetiré siempre, la lectura tiene que ser algo que se haga por pasión, gusto y amor, NO una obligación. Lulu menciona como tendemos a mecanizar la lectura, a convertirla en una obligación y querer formarles a los niños “el hábito” de la lectura, cosa con la que ella está en desacuerdo y yo la apoyo totalmente. A ver los hábitos son cosas que tenemos que hacer, que son necesarias por higiene o disciplina, pero pocas veces las hacer por gusto o pasión; esta perfecto que quieras que los niños se laven las manos y los dientes, que tiendan la cama y así, pero la lectura (al menos para Lulu y muchos lectores, incluida yo) no funciona así. si quieren que un niño lea tienen que formar lectores no hábitos.

Y es que aquí entra una de las grandes confusiones, creer que la lecto escritura es lo mismo que LA LECTURA, me explico. Me parece indispensable que un niño adquiera la lectoescritura, pero eso es un proceso cognitivo muy aparte de la lectura de comprensión, que es a la que yo me refiero (y de la que habla lulu en el video). Un chamaco puede “saber” leer y escribir, pero no entiende lo que lee, porque solo se le enseño un proceso mecánico y de repetición o memoria, no se les enseña a comprender, en el sentido más amplio de la palabra. La comprensión de una lectura no es la misma para un adulto que para un niño (y aun así hay adultos que son analfabetas funcionales), entonces porque queremos que los niños comprendan lo mismo que nosotros. Cuando se les hacen exámenes de “compresión lectora” se les preguntan detalles tipo “¿de qué color era el vestido de fulana?” eso es memoria, y eso si el chamaco es bueno memorizando lo recordara, pero eso no te dice nada de que el niño haya entendido algo de la lectura.



Neta un día intenten sentarse a escuchar lo que un niño les platique sobre un cuento que leyó o que le leyeron, así libres, sin preguntas mecas de los adultos. Y verán como los morros les narran una historia, a lo mejor no textualmente, palabra por palabra lo que decía la historia, puede que sea una idea super general, pero mientras más grandes sean los niños, te contaran cosas más elaboradas sobre lo que les hizo SENTIR Y PENSAR esa historia, ESO es lo que ENTENDIERON de la historia. Y es que tenemos que cambiarnos el chip, leer no es algo mecánico ni se da en el vacío; la lectura mueve cosas y lo que comprendas, lo que te provoque o no, tiene que ver con quién eres tú como persona, con tu historia de vida, tus experiencias, emociones e ideas. Es por eso que todo mundo a leído “la sirenita” pero no todo mundo entiende lo mismo (esto es mucho más grafico con libros como el principito).

Y por eso insisto en que dejen a los niños en paz, no quieras que el otro interprete una lectura como tú la interpretaste ni que se fijen en lo mismo que tú. Si neta quieres que comprendan algo, enséñales a acercarse a los textos, no los alejes con exámenes y metiéndoselos como una obligación. Que es lo mismo que termina pasando con materias como matemáticas o historia, tanto te joden con que tienes que memorizarlo, que te tiene que salir bien, tanto lo mecanizas que terminas por odiarlo y negarte totalmente a eso. Por eso hay tanto adulto analfabeta funcional, ok saben leer y escribir, pero te entienden la mitad de lo que leyeron; no tienen capacidad de abstracción y seguro gran parte de ellos ven la lectura como algo aburrido, primero porque toda su vida escolar fue algo obligatorio, en segundo porque jamás lograron aprender a abstraer cosas de un texto, solo mecanizaron el acto de leer y eso (al menos para mí) no es lectura.


Tenemos que entender que la lectura es algo que tiene que fluir y concuerdo con
Lulu cuando critica aquello de que “20 min de lectura al día” ¿y porque 20? ¿Porque no 10 o 35 o 5? Hacer tan cuadrado esto solo logran que ahora también los adultos que estén con el niño y son quienes le leen, lo vean como una obligación en vez de un momento para acercarse al otro. Leer con alguien más genera empatía y vínculos afectivos y ya no solo el leerle en voz alta a otro; otro error que se comete es que, ya que el niño sabe leer, ya, lo dejo solo porque ya puede. Otra vez haciendo eso lo estás viendo como obligación “ya te di la herramienta ya hazte bolas” creen vínculos ¡coño! Como dijo Lulu porque no que ahora él te lea a ti, pero insisto, no en un rollo académico cuadrado y rígido de examen (estar corriéndolo todo el tiempo y hasta cronometrando cuantas palabras lee por minuto, no hagan eso por dios) porque estarás matando algo que podría haber sido un momento bonito padres-hijo, un rato de convivencia y vinculo.

Tenemos que grabarnos que uno no siempre está de humor o el texto no siempre te atrapa, por eso no le veo sentido a que a huevo sean 20 min. A lo mejor hoy el chamaco solo quiere leer 10 o 5 min, a lo mejor ese libro no lo atrapo, igual y al rato agarra uno que lo engancha cabron y se queda 1 hora de corrido leyendo o se acaba el libro de un jalón. El lector es quien marcara el ritmo, a mí me pasa; con todo y que soy una lectora voraz y apasionada, hay días que no tengo nada de ganas de leer o que mi cabeza no da pa más y solo leo 5 minutos, y hay veces en que un libro me atrapa tanto que me lo leo del tiron así acabe de madrugada. Déjenlo fluir, esto es como el amor, no se puede forzar.

Borges decía que la lectura es una forma de felicidad y no se puede obligar a
nadie a ser feliz. Tal cual. Esto pasa como cuando a alguien le apasiona un deporte, las matemáticas, el dibujo o alguna otra disciplina; son formas de felicidad, lo son para las personas que las aman, y no se puede obligar a todo el mundo a que ame algo. Habrá quien haga clic con los libros de manera tan profunda como lo hice yo y tantos otros; que los libros toquen fibras en él, que nada más ha logrado tocar. Habrá gente a la que no, finalmente la literatura no te hace ser nada. No te hace mejor persona, ni más inteligente ni más culto. Te puede o no abrir puertas, eso depende de tu historia personal. La lectura y la literatura no son algo necesariamente “utilitario” como lo puede ser el deporte (que estrictamente te mantendrá sano) o las matemáticas (que, joder son necesarias pa todo, las hijas de puta) en el sentido de que te den algo o te conviertan en algo (alguien más fuerte, más sano, más rápido, con pensamientos más abstractos o veloces). Todos los que se las dan de muy elevados y especiales por que leen mucho, lo único que son, es unos tremendos snobs inmamables y pedantes.

La literatura no es algo que está reservado para unos pocos elegidos, superiores a los simples mortales. Si es un arte, pero un arte que está al alcance de todos, como la música. Dejemos de cargarle todos estos milagritos a la lectura que solo la llenan de ese halo de misticismo que aleja a la gente porque creen que eso no es para ellos, que ellos no han sido llamados a ser lectores. Cualquiera puede leer y no hace falta leer cosas super elevadas o difíciles para ser un lector. Lector es aquel que lee, disfruta y comprende cosas de aquello que lee. Y aquí viene otro punto que quiero tratar: los libros de “valores”. 

Transmitírselo a los pequeños que tengan cerca. Así como todo tiene matemáticas, toda historia tiene “valores”; esto entendiendo que no hacen falta libros específicamente para enseñar algo. Hago aquí una acotación importante que también menciono Lulu: esto no aplica a las fabulas clásicas tipo Esopo, porque si bien tienen una moraleja, también sirven para entender todo el contexto e idiosincrasia de una época y cultura. Muy diferente a cuando les quieren enseñar a los niños el valor de la amistad con un cuento que diga textualmente “vamos a ser amigos y a querernos y respetarnos”. Este tipo de libros a mi me parecen una forma muy maniquea de querer meterles una idea a la de a huevo a los niños, tratándolos incluso de idiotas; hay mejores formas de mostrar un mensaje como la amistad. No vamos lejos en la saga de Harry Potter se habla de amistad, de lealtad, incluso de racismo, clasismo, fascismo, abuso, manipulación, revolución, libertad, amor (en sus diferentes formas), valentía, odio, compasión, sacrificio, madurez y mil cosas más, todo eso contado de manera orgánica dentro de la historia sin tener que lanzarte el mensaje a la cara. Y ejemplos como este abundan en todo tipo de literatura.

Lourdes lo resumió de manera magistral “esas píldoras son muy amargas de tragar” querer meterle a fuerza una idea a los niños o buscar que adquieran un habito a través de un texto escrito explícitamente sobre eso, pues mira podrá ser un texto bien redactado y con coherencia, pero no es literario y por tanto se va a sentir como que estas leyendo el sermón del padre o un panfleto sobre buenos hábitos como los del plato del buen comer (y díganme si alguno de esos ha funcionado). Tras todo lo dicho creo que a quedado claro el punto, no queda mas que recalcar que debemos formar lectores no hábitos, que hay que dejar de colgarle milagros a la lectura, valores hay en cualquier historia (aunque no sean obvios o explícitos) y que cada persona se acerca de manera distinta a las lecturas dado que su comprensión de las mismas esta permeada por su historia de vida y quien es el como persona.

Muchas gracias si llegaron hasta el final de este tremendo pergamino, creo que había muchas cosas que decir y me he quedado tan a gusto por fin poder traerles este post. De verdad tengo curiosidad por saber que piensan sobre este tema, si ustedes son lectores apasionados como yo, si les choca leer o les toco que los forzaran a leer libros en la escuela, espero leerlos en los comentarios. Por ahora yo me despido y nos leemos la próxima vez.